Homenaje a Jaime Sabines

Homenaje a Jaime Sabines - Edición 2014

Te quiero a las diez de la mañana

Te quiero a las diez de la mañana, y a las once, y a las doce del día. Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo, a veces, en las tardes de lluvia. Pero a las dos de la tarde, o a las tres, cuando me pongo a pensar en nosotros dos, y tú piensas en la comida o en el trabajo diario, o en las diversiones que no tienes, me pongo a odiarte sordamente, con la mitad del odio que guardo para mí.

Luego vuelvo a quererte, cuando nos acostamos y siento que estás hecha para mí, que de algún modo me lo dicen tu rodilla y tu vientre, que mis manos me convencen de ello, y que no hay otro lugar en donde yo me venga, a donde yo vaya, mejor que tu cuerpo. Tú vienes toda entera a mi encuentro, y los dos desaparecemos un instante, nos metemos en la boca de Dios, hasta que yo te digo que tengo hambre o sueño.

Todos los días te quiero y te odio irremediablemente. Y hay días también, hay horas, en que no te conozco, en que me eres ajena como la mujer de otro. Me preocupan los hombres, me preocupo yo, me distraen mis penas. Es probable que no piense en ti durante mucho tiempo. Ya ves. ¿Quién podría quererte menos que yo, amor mío?

Jaime Sabines

Una probadita del evento

El pasado puente de la quincena de marzo se celebro un homenaje a Jaime Sabines, el poeta chiapaneco. Y como tal se hizo un tianguis de artesanía chiapeneca en la casa de cultura que lleva su nombre en la colonia San Ángel.

Tiene como tres años que descubrí Chiapas; fue el último viaje de mi juventud. La piedra que separo al joven fiestero del hombre que hoy es papá y sigue aprendiendo. Jaime Sabines, Chiapas, San Ángel y el baile folklórico simbolizan mucho para mí. Podría detallar el porque cada uno de ellos es importante en mi vida pero prefiero expresarme con lo mejor que sé hacer.